Hoy, he estado la mayor parte del día fuera de casa, (como más o menos igual que lo que va de semana y lo que me queda), he llegado hacia las diez menos diez, cuando salí del bus llovía, no muy denso, peor a medida que me acercaba a mi casa la cosa iba a más. Hasta que... me quedaban unas tres manzanas para poder llegar a mi casa y entonces PLASH, pisé una de estas baldosas que están sueltas y desprenden a lo "zorro" agua, pero esta no era de las típicas NO, esta me bañó; acabé con las dos piernas (pantalones) de la rodilla para abajo PRINANDO, el pantalón era gris claro, pero empezó a coger un tono casi negro, fue muy desagradable.
Y claro, hasta que llegué a mi casa no me los pude quitar... y era un frío (casi con una sensación cercana al hielo en la piel) que tal vez se podría comparar al dolor de ovarios en la "espalda"/barriga, según quieras decirlo o entenderlo. -Claro, que si estuviera enfadada, o llevara una mala semana o casas parecidas, me habría cabreado bastante, pero no; "cosas que pasan pensé", estoy cambiando y mucho. Tengo miedo.-
Por cierto, que no tenía paraguas (hace tres días me olvidé el mío plegable en un aula tras un seminario), porque como por la mañana hacía sol... (cosas razonables sí); menos mal que capucha sí.
Conclusión, debo comprarme un paraguas plegable para llevar siempre encima, y además fijarme bien por donde piso.
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4 comentarios:
Si hubieras pirado no hubieras pasado tantas penurias, há.
Oyeee, no cotillees, que de este blog no sabe la existencia ni el señortodopoderosocoordinadordelblogspot.com.
Ains, y si te digo que mi "lista" de faltar a clases sigue igual que desde que empecé... jajaja.
Lleeré lo que me dea pola gana. Há.
Buahhhh, ¡Feliz Navidad!
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